El crecimiento de la extrema derecha se basa, a mi juicio, en la promesa de seguridad que ofrecen a los sectores desprotegidos de una sociedad. Es así como estos proyectos clasistas y xenófobos han conseguido atraer no sólo a la clase trabajadora, perdedora directa de la globalización, sino también a las auto percibidas clases medias, víctimas adicionales de la globalización y la crisis.
Desde el punto de vista teórico, esto es coherente. El avance del libre mercado como criterio rector de la sociedad, cuestión en la que la globalización neoliberal es ejemplo paradigmático, conlleva el salto al vacío de sectores sociales otrora protegidos por las políticas públicas. Es lógico que estos sectores busquen en la política, pero también fuera de la misma, su propia seguridad. Y he aquí la verdadera disputa de nuestro tiempo, a saber, la de qué proyecto político será capaz de articular propuestas de seguridad no basadas en las posiciones de la extrema derecha sino en los valores y principios de la izquierda. O, por decirlo de otro modo, qué proyecto político será capaz de crear una alternativa creíble que proporcione seguridad, entendida en su concepción civil y no militar, a la clase trabajadora y, por ende, a la mayoría de la población. La pregunta es obvia: ¿cómo hacerlo?
Buscando entender lo que sucede en nuestro propio país, que no ha sufrido aún la irrupción de una fuerza explícitamente de extrema derecha, no podemos pasar por alto una experiencia tan significativa como fue la del movimiento 15M. Este movimiento fue un fenómeno heterogéneo y espontáneo producto más de la indignación y frustración que de la conciencia de clase. Una indignación que, sin embargo, se elevó contra las consecuencias de la crisis económica y del modelo de sociedad. Parece obvio, sin crisis económica no hubiera existido el 15M. Pero este movimiento, a su vez, permitió canalizar la frustración y rabia de la gente en una dirección de izquierdas, gracias al esfuerzo de mucha gente por explicar la crisis desde esta perspectiva, y evitó que dichas emociones se cebaran con sectores aún más desprotegidos como son, por ejemplo, los inmigrantes.
Hay quien ha defendido que el fenómeno 15M estaba totalmente desconectado de las reivindicaciones históricas de la izquierda y que era, en suma, un producto nuevo de la historia. A mí no me lo parece. Más bien es precisamente en la crítica al sistema que da origen a la crisis donde encontramos el nexo entre el 15M y el movimiento obrero. El objeto de sus críticas es el mismo, si bien con distintos grados de conciencia y profundidad. Por esa razón los nuevos indignados del 15M se veían reflejados y representados en las palabras de algunos dirigentes de la izquierda tradicional como, por ejemplo, Xosé Manuel Beiras o Julio Anguita.
La pregunta sería la siguiente: ¿por qué estos activistas no se sentían reflejados en todos los dirigentes del movimiento obrero? Respondiendo a esta pregunta, que se encuentra en la encrucijada del problema actual, Pablo Iglesias esbozó recientemente su hipótesis principal: «lo fundamental es que suena diferente, suena duro». Aquí hay una posibilidad de interpretarlo como estilo estético, cosa que a mi juicio sería un error. Es decir, la afirmación puede ser correcta siempre y cuando no se refiera exclusivamente a la forma-estética de articular un discurso. Lo acertado es, más bien, interpretar «diferente» y «duro» en términos de contenido político.
Expliquémoslo. Lo que la indignación del 15M refleja es una crítica difusa y poco consciente al sistema, entendido casi de un modo holístico (abarcando desde lo económico hasta lo político). Pero es evidente que detrás de esa indignación se encuentran hondas quejas sobre las condiciones materiales de vida, tanto de la clase trabajadora más popular (y más despolitizada) como de la autopercibida clase media que sufre el desvanecimiento de sus sueños de pequeña burguesía. Y ello se concreta en las tasas de desempleo, los recortes en los servicios públicos, el fracaso del ascensor social, las nulas expectativas de futuro, etc. Todo ello son manifestaciones concretas de la crisis del sistema económico capitalista y de la gestión neoliberal de la misma. Pues bien, esa difusa y poco concreta indignación ha conectado mucho mejor con los mensajes políticos que impugnaban el sistema político y económico y que, además, lo hacían mediante discursos entendibles por la gran masa. Una combinación de contenido duro/rupturista con un discurso claro/entendible. Es el caso paradigmático de Xosé Manuel Beiras y Julio Anguita, pero no sólo. Con lo que no podía casar bien es con los mensajes o actores políticos que se asociaban de forma directa con el sistema mismo o cuya crítica impugnatoria del sistema era débil o poco creíble.
Entonces, sonar duro quiere decir ir a la raíz del problema en términos de contenido –lo que no impide un acompañamiento de discurso que también sea duro en términos de estilo. Y sonar diferente quiere decir impugnar el sistema, hablar de un modo distinto al que hablan los que defienden el sistema –aquí, de nuevo, tanto de contenido como de estilo. Ambas cosas van asociadas, naturalmente, a la tríada de ruptura democrática, proceso constituyente y proyecto socialista, aunque luego cristalicen en discursos pedagógicos y hábiles que permitan vadear los prejuicios construidos por la ideología dominante.
Pero, ¿por qué unos dirigentes del movimiento obrero sonaban duro y diferentes y otros no, esto es, sonaban suave y más de lo mismo? A mi juicio la respuesta está en una deriva política que capturó a muchos de ellos: la institucionalización, es decir, el quedar atrapado en la lógica institucional a todos los efectos. Ello tiene implicaciones políticas, como veremos enseguida, pero también implicaciones operativas –el despliegue de recursos de tiempo, energía y personas en las instituciones supone un enorme coste de oportunidad. Ese, y no otro, ha sido el principal problema de la izquierda tradicional con la que no se identificaba el 15M. Sólo que con un agravante, que fue el hecho de que esa institucionalización fuese no una consecuencia incontrolada sino una firme apuesta ideológica. Podemos rastrear ese hito en la transición, hasta llegar a la famosa frase de Carrillo en el Congreso, en 1978, según la cual «se trata de una constitución –y por eso vale para todos- con la cual sería posible realizar transformaciones socialistas en nuestro país».
El principal problema de la institucionalización es político, y es que parte de la asunción de que el instrumento prioritario para transformar la sociedad es el ámbito jurídico/legal. Esto supone ignorar el contexto internacional de la globalización neoliberal -que reserva al Estado-Nación un papel subalterno- pero sobre todo ignorar la naturaleza del Estado, que como relación social es la condensación de la correlación de fuerzas en toda la sociedad. Una correlación de fuerzas que, sobre todo, se constituye fuera de las instituciones legales. Antes de desarrollar esto, cabe decir que es natural que si uno asume esa hipótesis sobre la institucionalización acabe absorbido por la lógica parlamentaria y por su consecuente competición por los votos desde una perspectiva crecientemente atrapalotodo. Las instituciones normalizan y es natural que crezcan las tendencias a parecerse a los partidos tradicionales. El estrecho margen que abre la institucionalización conduce, necesariamente, a ese destino.
Ahora bien, no se trata de negar el papel transformador que puedan jugar las instituciones dentro de una estrategia más amplia, pero convendría entender que los resultados electorales –como una expresión institucional- son fundamentalmente el resultado de procesos que se dan más allá de las instituciones. Es a eso a lo que nos referíamos con la idea de la correlación de fuerzas en la sociedad. Es en la vida cotidiana y, sobre todo, en el conflicto, donde se genera la subjetividad o conciencia de clase que permite sumar fuerzas para ganar elecciones y para transformar la sociedad. Y es verdad que la vida cotidiana se ve afectada también por las decisiones institucionales, de ahí que reconozcamos su papel transformador, pero sobre todo por vivencias que van más allá del sistema político en sí.
Aquí es donde podemos recuperar una de las correctas afirmaciones de Pablo Iglesias que, a mi juicio, es muy necesaria: «la clave es politizar el dolor». Como decía, es en el conflicto social (sea un desahucio, un ERE o los recortes en sanidad y pensiones) donde emergen las contradicciones más agudas entre el sistema económico y la vida misma, y es precisamente ahí donde pueden surgir nuevas subjetividades, es decir, nuevas concepciones del mundo y nuevos comportamientos electorales. El punto central aquí es entender qué significa politizar. Ya sabemos que la gente tiene dolor, como consecuencia del conflicto. Ahora bien, politizar puede entenderse como el desplazamiento de ese dolor al terreno institucional, como cuando el partido opera como simple denunciante o incluso en tanto que, permítaseme el comentario, abogado defensor. O podría interpretarse politizar como el proceso por el cual el dolor, que es primario, se convierte en compromiso político, es decir, que asciende hasta la conciencia completa del fenómeno que causa el dolor. A mi juicio, esta última interpretación sería la correcta mientras que la primera sería caer en un error de institucionalización.
En definitiva, a mi no me parece suficiente ser altavoz de las denuncias surgidas en los conflictos sino que hemos de ser intelectual orgánico para explicar las causas últimas de esos conflictos. Es decir, no se trata sólo de trasladar lo que sucede en la calle al parlamento –que es, de por si, un avance- sino de ir más allá y, además de ser el conflicto mismo, ser capaces de explicar a los afectados y al resto de la clase trabajadora que detrás del fenómeno del conflicto hay una interrelación compleja de causas y responsables que tienen que ver con el sistema económico capitalista y con su cristalización política en los partidos del régimen.
De ahí que nosotros demos extraordinaria importancia a la formación ideológica, algo abandonado por la izquierda tradicional (entre otras cosas porque para las fuerzas institucionalizadas la formación no es necesaria), pues entendemos que necesitamos militantes y dirigentes capaces de explicar los conflictos sociales. Esto está vinculado al tipo de organización, en tanto que una fuerza institucionalizada no sólo no necesita la formación ideológica sino que además genera dudosos incentivos para disputarse los puestos de representación pública, haciendo caer a la organización en el faccionalismo e incrementando sus tendencias oligárquicas.
Obsérvese que en nuestro país ya hemos presenciado ejemplos de estas prácticas. La Plataforma de Afectados por la Hipoteca, por ejemplo, no es sólo la autoorganización de las víctimas de los desahucios y las estafas hipotecarias. Más bien es un proyecto de defensa popular que ha contado con dirigentes que han sabido ser conflicto y al mismo tiempo explicar sus causas de tal forma que la rabia de la víctima se elevaba a compromiso político –aunque este compromiso no fuese estrictamente socialista.
Finalmente, el punto de fuga de todas estas reflexiones nos conduce a la cuestión verdaderamente central: el proyecto político o proyecto de país. Sin un proyecto de país, que es fundamentalmente contenido político, no hay nada que transmitir en el conflicto ni nada que transmitir tampoco en las instituciones. Sin un proyecto de este tipo todos estos debates son estériles. Incluso podríamos haber aceptado que las instituciones son altavoces y que la clave está ahí fuera, pero sin un proyecto de país que defender no hay coherencia ni estrategia posible.
Así, mientras la extrema derecha está ofreciendo una respuesta a las condiciones materiales de vida de la clase trabajadora, y desgraciadamente con notable éxito, la izquierda anda entretenida en discusiones escolásticas sobre instrumentos y estrategias que provocan que la clase trabajadora y el conjunto de la sociedad no esté entendiendo qué se les ofrece (más allá, en el mejor de los casos, de canalizar su rabia; por supuesto, efímera sensación).
En este punto, una advertencia. La mejor forma de repetir los errores de la izquierda tradicional con la que no se identificaba el 15M es deslizarse a través de la estrategia de eso que se ha convenido en llamar populismo de izquierdas, y que tanto comparte con la práctica política carrillista. Ambas estrategias son esencialmente tacticistas, aunque por diferentes razones. La primera porque es alérgica a la definición y navega en un mundo de significantes vacíos que se moldean a gusto del consumidor -aunque el empacho es ya notable- y por lo tanto es incapaz de definir un proyecto político en positivo. La segunda porque emplea un pragmatismo mal entendido que le lleva a ceder todas sus posiciones a cambio de mínimos –pero comodísimos- espacios de institucionalización. Ninguna de estas estrategias comparte los rasgos que hemos descrito aquí como necesarios.
Por el contrario, a mi juicio, la clave para afrontar victoriosamente nuestros retos puede reducirse a los siguientes elementos: proyecto político y conflicto social. Si somos capaces de entender que la máxima anguitista debe ser reformulada, para evitar malinterpretaciones, desde «programa, programa, programa» a «proyecto, proyecto, proyecto» entonces estaremos en condiciones de poner en lo más alto aquello que más importa, es decir, el contenido político que ofrece soluciones concretas a la vida de la clase trabajadora y del pueblo en su conjunto. Eso implica, obviamente, definir y hablar claro; sonar duro y diferente. Y con ese proyecto en la mano, hemos de ser y estar en el conflicto, explicando y haciendo proselitismo para una causa que merece la pena. Yo la llamo socialismo, pero estoy dispuesto a discutir el nombre a condición de que haya praxis.
Gracias, muchas gracias por plasmar pensamiento y rumbo
Que lastima todo lo escrito para no decir nada
Y eso que en final estaba implícito, lo que debía decir, pero se quedó en eso.
Dice al final:
Si cambiamos a «proyecto…», estaremos en condiciones de poner lo que más importa: Soluciones a la clase trabajadora y al pueblo en su conjunto
Y ahí se queda
Hace ya bastantes meses, hizo otra reflexión parecida, sin terminar y yo comente:
Cambia lo de proyecto, proyecto proyecto, por trabajo, trabajo, trabajo
Porque lo que más importa a la clase trabajadora es tener TRABAJO
Y ningún partido se lo está ofreciendo
Se enredan en cuestiones políticas, porque no tienen soluciones de TRABAJO
Ahí tenemos al PSOE, con sus navajazos internos. Alguien cree que si Pedro ó Susana ó cualquier barón, propusiera crear 1 millón de puestos de trabajo REALES, los simpatizantes no les iban a seguir como al Flautista de Hammelin.
Ahí tenemos a PODEMOS con su crisis de liderazgo, peleándose entre Pablistas y Errejonistas
Encandilaron a la gente con la Renta Básica Universal (a una parte de la gente), pero ahora no tienen ni la RBU, que se lo han desmontado los economistas ni TRABAJO que ofrecer y que atraería a un gran electorado
Ahí tenemos a Garzón, que se sacó el Trabajo Social Garantizado, pero como era muy complicado, lo dejó para pelear por hacerse Coordinador de IU
Y aahora solo le leen y le siguen sus incodicionales
Y claro, queda el PP que mentira a mentira y con todos los medios de comunicación a su servicio, dice que ha bajado el paro en 5 millones de ciudadanos, y la gente les vota.
No tenemos solución
Excelente texto para reflexionar serenamente.
También serenamente: este blog se halla bloqueado. Podría ser una herramienta de reflexión constructiva pero parece haber sido fagocitado. Es una lástima.
Saludos
¿Fagocitado? ¿A qué te refieres?
Jose, totalmente de acuerdo, acaso la seguridad, el dolor y la esperanza, no están intimamente vinculadas al mundo del trabajo. En España según el informe del BBVA, desde 2003 a la fecha, 3 millones de españolit@s han perdido su condición de clase media. De otra parte el descenso de las rentas del trabajo con las del capital, son también un indicador. Y los cambios operados han provocado que trabajar y pobreza sean compatibles, modificando el concepto y la dimensión social del trabajo.
Sin embargo, hay un aspecto al que no se le da repercusión, que es el paro por elevación de la productividad tecnológica. Del que no se salvan, ni siquiera los costes laborales bajísimos, así en China una fábrica ha sustituido a 600 emplead@s por 60 robots, multiplicando la producción y bajando de dos a un dígito los errores en la producción http://www.elmundo.es/economia/2015/09/07/55e9d2f4ca4741547e8b4599.html.
Igualmente en Pittsburgh se ha comenzado a ensayar los taxis sin conductor, para evaluarlos en la práctica -como el viaje de prueba de un tren- tras la aprobación de su implantación, UBER ya ha comenzado las prácticas del mismo, y tras la evaluación se generalizará su uso en Pittsburgh, para después extenderse en el globo. Imaginais el impacto que tendrá no para el mañana, sino para unos días la implantación de esta tecnología.
http://elpais.com/elpais/2016/09/26/opinion/1474909124_506315.html
Pero este avance no sólo afectará a la conducción profesional, sino también a la privada, a la industria del transporte en general y la automovilística en particular. Recordareis que ya hay empresas norteamericanas trabajando en la multipropiedad o lisening al momento y la carta, precisamente para la conducción automática.
Por qué tener sólo un coche, cuando puedes disponer de vehículo cuando lo necesites, con características diferentes en función del uso a dar, sin preocuparte del aparcamiento, ni del mantenimiento, y pagando por el uso efectivo, no por tenerlo estacionado la mayor parte del tiempo.
Sobre las energías renovables ya hemos hablado en no pocas ocasiones, y nadie explica por qué los costes de instalaciones son menos amortizables que el desembolso en nucleares.
Pero volviendo a lo que nos interesa desde la perspectiva del trabajo, en España y el mundo multitud de empleos no automáticos, sino considerados hasta ahora del conocimiento, están desapareciendo por la acción de la inteligencia artificial. Cuantos contables no son sustituidos por programas, economistas, administrativ@s…
La revolución tecnológica en curso no sólo sustituye a trabajadores manuales, ya hay bares que funcionan tal si fueran estaciones de gasolinera…, sino que abarcan a profesiones de las llamadas liberales. Sólo a los altos directivos y profesionales muy cualificados se verían poco afectados por la inteligencia artificial http://www.eldiario.es/piedrasdepapel/computerizacion-trabajo_6_501909818.html
Para un marxista, el modo de producción expresa una relación de dominio sobre el trabajo, que es el portador del valor (aunque en mi opinión el intercambio afecte al mismo y sus cambios, al igual que el azar).
Todas estas reflexiones sobre tecnología (infraestructuras), valor, trabajo y relaciones de dominio o desigualdad, nos llevan al planteamiento realizado por tí, sobre la RBU o el TSG, como medios de proveer trabajo, recurriendo a una distribución más equitativa de sus beneficios. Probablemente la alta productividad aparejada a tanta aplicación efectiva de la tecnología, provocará la emergencia de nuevos trabajos, y también es posible que la invención -no innovación- traiga diversificación de industrias y productos ex-novo. Pero históricamente, éstas coyunturas económico-sociales, han venido precedidas de auténticas hecatombes humanitarias, ya ha empeorado mucho la vida estos últimos años en el mundo.
Hoy día, no es que no podamos asumir el dolor. Como plantea Krugman: por qué hacer sufrir, si hay medios para paliar los efectos. Hoy día, sino paramos los efectos del sufrimiento, podemos vernos arrastrad@s a una hecatombe de especie, incluso planetaria, sencillamente porqué hay capacidad para ello, y por varias veces.
En España lo tenemos complicado, con un modelo productivo que sigue apostando por Turismo y Construcción, continuamos apostando como modelo de crecimiento, por la especulación-corrupción extra- unida a la burbuja financiera .
Zapatero había introducido un cambio objetivo, la apuesta por el sector energético renovable- un puntal-, base para la transformación del modelo productivo y su despegue con soberanía energética. Pero llego el PP y retiró las subvenciones e incluso penalizó impositivamente las inversiones, pues discriminar positivamente a quiénes apostaban por la soberanía energética… .
Puestas así las cosas, con unas grandes fortunas mayoritariamente vinculadas a la especulación sea inmobiliaria o financiera en sus diversas faces (fondos de inversión, bancos, aseguradoras…); el crecimiento económico español es a la corrupción, como el membrillo al queso. Y el trabajo se seguira creando a mayor velocidad que la media europea en expansión(ahora más precario y desprotegido), y se destruirá a muchísima mayor velocidad en vacas flacas, por su alta dependencia exterior.
Pero a éstas alturas a quien le interesa la TSG, la RBU, o cualquier otra cuestión.
Decía Alberto remarcando con negrita las palabras de Iglesias, «hay que sonar duro», «hay que sonar diferente»; sin negrita, » hay que politizar el dolor». Para paso seguido explicarnos su particular interpretación (cosas del líder-Iglesias- como significante vacio); Pero olvidaba lo dicho antes de otr@s dirigentes, que incluso cuando suenas duro, la credibilidad debe acompañarte, y si has sonado con decibelios diferentes en toda la escala, y además vertiginósamente en sólo en dos años ¿con cuál nos quedamos?, porqué hay que sonar diferente, pero no tantas veces en tan poco tiempo. Como venía a decir el propio Alberto en una ocasión, se corre el riesgo de que a la persona se la coma el personaje; algun@s han sido devorad@s por el personaje, esperemos que no le ocurra a Alberto.
Por cierto, Jose, ahora mismo donde se está dando la batalla que posibilitará el sí a Rajoy o explorar una alternativa, es en el PSOE. Los medios están manipulando por un tubo, Spanish is different, y como decía Inclán la única forma de retratarla era el esperpento, pero en RU los parlamentarios cesaron a Jeremy Corbin y este les ha ganado el Congreso a tod@s l@s varones.
Un abrazo.
A los «varones» y a las hembras
Imaginaté Pedro Sánchez que es más guapo que Jeremy
Por lo demás coincido plenamente contigo en cuanto a lo que apuntas sobre el trabajo y los nuevos desarrollos y las hecatombes humanitarias hasta que se asienten
Pero por eso mismo, los políticos serían más creibles si dedicasen más tiempo a buscar soluciones a esos problemas reales y no a quitaté tu pa ponerme yo
Por cierto, hoy Felipe Gonzalez ha estado sembrado
Ha dicho: Pedro me dijo que se abstendría y yo no miento nunca, salvo por el bien de España
Un abrazo
«El gran Cartago lideró tres guerras: después de la primera seguía teniendo poder; después de la segunda seguía siendo habitable; después de la tercera ya no se encuentra en el mapa».
(Albert Camus)
Lo del PSOE acabará como Cartago…
Saludos
Eso mismo le decía yo a Cayetano el 27 de Junio
En las proximas elecciones, el PSOE desaparecido
Los 85 escaños se reparten a partes iguales entre UP y PP
Concretando UP 116 escaños y PP 137 + 40 + 32 de C,s = 209 escaños, mayoría absoluta
Habrá que felicitar a Pablo Iglesias, por haber llegado en 2 años a ser cola de león a costa de dejarle al león corrupto con muchísima más melena
Enhorabuena al nuevo bipartidismo
¿Con qué equipo jugaba hoy Pablo Iglesias, antes del federal en el PSOE?
Nuestros retos son ahora, pues no sólo con la instituciones como altavoces, sino como medios de acción y ejecución política, se puede empoderar a las gentes.
¿A qué juega Pablo Iglesias hoy? -le he escuchado en directo en la CUATRO-, sumándose al rebaño contra el soldado Sánchez a dos días del decisivo Federal del PSOE. Negando una vez más la posibilidad de gobierno, aduciendo problemas de formas y calendarios.
Ha vuelto al Iglesias de la rueda de prensa tras el encuentro con Felipe VI-tras el 20-D-, negando las palabras de Errejón ayer; dando una patada a la posibilidad difícil, pero posible de alternativa a Rajoy. Dando una patada a la única posibilidad de alternativa a Rajoy, pateando a Pedro Sánchez.
Alberto no expliques que es «polítizar el dolor» para Pablo Iglesias, el sólo se explica bien, y te desmiente. No expliques que es sonar duro para Iglesias, hoy su escala de diapasón estaba en armonía con Felipe González, Susana Diaz, C’s, y toda la cohorte del stablishment y puertas giratorias.
Hoy, querido Alberto, Pablo Iglesias ha dado una patada a Pedro Sánchez, pero te aseguro que esa patada la han sentido much@s, y en estos días debiera sentirla el mismo.
Comprendo su anhelo por desarbolar al PSOE, pero no acosta de apuntalar a Mariano Rajoy. Hemos hablado de lo que su gobierno supondría-no vamos a extendernos- entrar en una etapa sólo comparable con la deprimente época del 98, del 1898.
No se si perderá Sánchez y ganaran las puertas giratorias en el PSOE, no se si habrán terceras elecciones o no, si habrá gobierno alternativo pese a las dificultades. Pero con la actitud de Iglesias, puedo asegurar que por muy duro que me sea, por mucho desgarro que sufra, si IU le acompañara, no volveré a votar esas candidaturas.
¿Con qué equipo jugaba hoy Pablo Iglesias, antes del federal en el PSOE?
Hay quienes tienen demasiada ambición en lugar de corazón.
Un abrazo.
Me parece que nuestros esfuerzos deberían orientarse a estructurar un pensamiento político, alternativo al capitalismo que fuera comprensible y APLICABLE. Los hechos demuestran que HOY no existe un pensamiento político cohesionado. Alberto Garzón forma parte de quienes generan la esperanza (a mi, y a algunos más, creo) de que algo sólido se va construyendo.
Por cierto, muy interesante: http://markdezabaleta.blogspot.com.es/2016/09/un-experimento-socialista.html
Otro «por cierto», Fagocitar (wiktionary) : Hacer desaparecer una cosa absorbiéndola, incorporándola de modo que desaparece su individualidad
Saludos i salud
Josep, no lo dudo, sólo que matar la posibilidad de alternativa con Pedro Sánchez liderando el PSOE, es matar la posibilidad de gobierno alternativo al PP. No se a que pensamiento pertenece, pero sí es práctica política. Quizás debieramos recordar toda la campaña electoral, en la que unánimemente se convocaba a gobernar con el PSOE, y ser un poco más coherentes.
La batalla del PSOE se esta lidiando rápido, tan rápido que esta mañana Pablo echaba leña al fuego contra Sánchez. Mientras ahora, cuando le han presentado 17 dimisiones en la ejecutiva, se solidariza con quien eligió las bases ante el aparatazo.
Tod@s sabemos que si Sánchez pierde, gana Rajoy y el alma de los consejos de administración en el PSOE. Pero no sirve decir este es el PSOE de siempre; no será una victoria de la izquierda, sino una derrota que abre los ignominiosos años de 1898.
A Sánchez de comérselo, se lo comerán como al griego que planteo el referendo, no a Tsipras, sino al del PASOK(Yorgos Papandréu), aunque también se han comido al del segundo referendo-sí, ya sabemos que Spanish is diferent-.
Algunos piensan que ahora toca ocupar todo el espacio del PSOE, pero de momento absolveríamos al PP y se investirá a Rajoy. Sobre el desánimo, la demolición sufrida por la alternativa, la izquierda no construiría teoría aplicable, creible, por mucho pensamiento que tenga.
A estas alturas, se nos escapa mucho de lo en juego, pero parece que en el PSOE hay quien esta dispuesto a romper todas las reglas y pautas de comportamiento. Incluso a romper el PSOE, para que Rajoy salga investido (con C’s sólo le faltan 6 diputad@s, a los 170 del PP+C’s). No nos equivoquemos, la batalla es investir a Rajoy y el único obstáculo real que veo, desgraciadamente no viene de nuestro pensamiento alternativo, y a la práctica me remito.
Para enterarnos, si cae Sánchez, C’s pasa a ser un convidado de piedra, ahora no tendría necesidad de votar a favor. El PSOE sin Sánchez, votaría sí a Rajoy de ser necesario, porque ningún candidato sustituto a Sánchez podría presentarse a su electorado.
Podemos quedar como los únicos referentes de izquierdas…, pero impotentes para dar alternativa al PP, afianzando su desviación autoritaria por la debilidad demostrada, y acrecentada de la oposición.
Habremos ganado ante algunos más ser los únicos referentes de izquierdas, pero nuestra victoria habrá sido pírrica, wikipedia: Una victoria pírrica es aquella que se consigue con muchas pérdidas en el bando aparentemente o tácticamente vencedor. De modo, que aun tal victoria puede terminar siendo desfavorable para dicho bando.
Para quiénes seguro será desfavorable, es para todos los sectores populares a quienes representamos, ¿te aventuras a pensar que pensamientos verán como creibles, aplicables, comprensibles?
Saludos cordiales.
Perdonad otro comentario. Si la política de los gobiernos de progreso, autonómicos o municipales, dependen de la resistencia o no, que se les muestre desde el gobierno central. No entiendo como podrá oponerse Ximo Puig al gobierno central con credibilidad, cuando es él quién lo facilita, y quién dice Ximo, dice Page… . Por eso, corriendo ha salido Cospedal a ofrecer su apoyo para mantenerse en la presidencia a García Page, como anticipo.
¿Cómo dejaría la posición de las izquierdas alternativas en cogobiernos o apoyos mútuos con el PSOE?
Una vez el PSOE hubiera superado el rubicon de gobernar con el apoyo del PP o apoyando al PP en el gobierno del Estado, y con el ofrecimiento del PP a apuntalarlos. ¿En qué posición quedaría la singularidad de izquierdas en la acción de estos gobiernos?.
Probablemente sin ataduras con sus izquierdas por garantías que alguien con solvencia habrá ofrecido, los varones anti-Sánchez habrán dado el paso. Pues todos gobiernan gracias al apoyo de PODEMOS o IU (Asturias), pero una vez investidos, pueden romper coaliciones de gobierno, y continuar con apoyos puntuales, aunque sean más o menos extensos y amplios en realidad.
Tod@s sabemos y Felipe González lo ha dejado claro, que se echa a Sánchez para facilitar el gobierno del PP, a partir de ahí, los mutuos apoyos puntuales serían extensibles a voluntad, en cualquier caso la capacidad determinante de UP sería mucho más enana, cuasi estética, como antes se explicó de C’s.
Saludos Cordiales.
Operación Tamayazos, se vuelve a repetir.
Son chuscas las argumentaciones contra Sánchez, hasta llegar a contar como suyos los votos de fallecidos, como el del compañero Pedro Zerolo, contabilizado favorable a la censura del secretario general y la ejecutiva (“es que está vacante”, repiten l@s vocer@s polític@s y periodistas, al más puro estilo caciquil, contabilizando entre l@s suy@s a l@s fallecid@s, ¿esperpéntico verdad?)
EL PSOE además, tiene un órgano unipersonal elegido por los militantes, su secretario general, y la ejecutiva es un órgano colegiado de elección indirecta. Sin embargo los de Susana, dicen que la convocatoria del Comité Federal correría a cargo de la secretaria del Cte.Federal –andaluza susanista- elegida indirectamente, no como su secretario general, pero que al parecer está más legitimada para convocar al Federal. Y además, a desconvocar al Federal, ya convocado por una ejecutiva plena, pues las dimisiones se produjeron días después de la convocatoria(lunes). Pero ya puestos, tampoco pasa nada, se hace retroactivo el efecto de las dimisiones, y ya está, así es el éstilo caciquil de l@s Tamayaz@s. Parece que los contactos con la derechona brasileña les ha enseñado, o quizás entre sus filas alguno les enseño.
Si han dado este movimiento, es porque perdían el comité federal de pasado mañana, y necesitaban deslegitimarlo, e incluso desconvocarlo o visualizar la ruptura dentro del PSOE.
Los pasos según los medios de comunicación pueden ser los siguientes, se reúne la comisión de garantías, un órgano en el que tienen mayoría los Tamayazos; desconvocarían al Federal y convocarían cuando fuera oportuno, por parte de la susadicha secretaria del Cte. Federal.
Pero, ¿para qué esta bomba atómica en el seno del PSOE?, sólo hay una respuesta plausible, digan lo que digan los críticos, no son los resultados electorales.
Como decía Lluis Orriols, politólogo y especialista en comportamiento electoral, a tres meses de llegar Sánchez, Podemos adelantaba en las encuestas al PSOE. Es como si en IU se hubiera responsabilizado de l@s 2 diputad@s a Garzón, comparándose resultados con 2011.
¿Por qué La bomba atómica a dos días del Federal? La única explicación plausible, justificar políticamente La Operación Tamayazos para asegurar al PP en el gobierno, sea cual sea la resolución del conflicto interno, incluso partiendo al grupo socialista y al partido para asegurarla, de hacer falta.
Con independencia de que los bloques no sean homogéneos, ese es el efecto pretendido. Alguien decía que 6 Tamayos eran demasiados, y comenzaron a pensar en una operación política más grande, por si las moscas, en una ruptura que no fuera personal, sino política. Quizás Rafael Simancas esté por ello con Sánchez, porque el sufrió la operación Tamayo, y por eso ahora se opone a los Tamayazos, pues estos pretenden lo mismo, asegurar al PP en el gobierno. Digan lo que digan algunos participes, saben que el motivo no es otro, y no debieran negárselo, y que las inquinas secundarias o posibles prebendas u ofensas, perjuicios o beneficios, no ocultan la mayor, y si la mayor les repugna están a tiempo todavía.
La bomba atómica no es para que decida la militancia o el máximo órgano, se reúne este sábado convocado por la ejecutiva. Ni para decidir sobre Sánchez, es para asegurar el gobierno del PP contra viento, marea y voluntad de l@s militantes y éste, que es el secretario general elegido por ell@s.
Esta bomba ha sido lanzada por la voluntad de Sánchez a intentar un gobierno alternativo, a la petición de que no lo maniataran como el 20-D.
Saben l@s Tamayaz@s que así se deja a España y los restos del PSOE a los pies del PP, sea cual sea el final de su conflicto interno. Y esperan ganar, que la verdad sea olvidada con el tiempo y perdonada, porqué Spanish is diferent, esperpéntica decía Inclán. Quizás sean capaces de eludir la sombra del PASOK, a la que acaban de insuflar vida; si gana Feijó en Galicia, Gobierna Rajoy en España, ¿ por qué no l@s Tamayaz@s en las próximas, dirán, no sin cierta razón o posibilidad?
Ahora, nos queda por ver el arrojo de Sánchez y su equipo, sabedores del apoyo de la militancia y como organizan al mismo, desde los municipios donde las comunidades están perdidas.
Lo claro es la voluntad escisionista de los Tamayazos, que no han esperado al sábado para debatir en el Comité Federal, e incluso han utilizado la muerte de un compañero (Pedro Zerolo) contra Sánchez, contabilizando su muerte como una posición crítica contra el secretario general. Después de eso, está claro que están dispuestos a todo.
Un cordial saludo.
Operación Tamayazos, se vuelve a repetir.
Son chuscas las argumentaciones contra Sánchez, llegando a contabilizar
La vacante del malogrado Pedro Zerolo como crítico al secretario general y la ejecutiva (“es que está vacante”, repiten l@s vocer@s polític@s y periodistas, al más puro estilo caciquil, contabilizando a l@s fallecid@s, ¿esperpéntico verdad?)
EL PSOE además, tiene un órgano unipersonal elegido por l@s militantes, su secretario general, y la ejecutiva es un órgano colegiado de elección indirecta. Sin embargo, l@s Tamayaz@s, dicen que la convocatoria del Comité Federal correría a cargo de la secretaria del Cte.Federal –andaluza susanista- elegida indirectamente, no como su secretario general, pero al parecer está más legitimada para convocar al Federal. Y además, a desconvocar al Federal, ya convocado por una ejecutiva plena, pues las dimisiones se produjeron días después de la convocatoria (lunes). Pero ya puestos, tampoco pasa nada, se hace retroactivo el efecto de las dimisiones, y ya está, así es el estilo caciquil de l@s Tamayaz@s. Parece que los contactos con la derechona brasileña les ha enseñado, o quizás entre sus filas alguno les enseño.
Los pasos según los medios de comunicación pueden ser los siguientes: se reúne la comisión de garantías, un órgano en el que tienen mayoría l@s Tamayaz@s; desconvocarían al Federal y convocarían cuando fuera oportuno, por parte de la Susadicha secretaria del Cte. Federal, para cuando tuvieran cocinada la nueva gestora.
Pero, ¿para qué esta bomba atómica en el seno del PSOE a dos días del federal?, sólo hay una respuesta plausible, digan lo que digan los críticos, no son los resultados electorales.
Como decía Lluis Orriols, politólogo y especialista en comportamiento electoral, a tres meses de llegar Sánchez, Podemos adelantaba en las encuestas al PSOE. Es como si en IU se hubiera responsabilizado de l@s 2 diputad@s a Garzón, comparándose resultados con 2011.
¿Por qué La bomba atómica a dos días del Federal? La única explicación plausible, justificar políticamente La Operación Tamayazos para asegurar al PP en el gobierno, sea cual sea la resolución del conflicto interno, incluso partiendo al grupo socialista y al partido para asegurarla, de hacer falta.
Con independencia de que los bloques no sean homogéneos, ese es el efecto pretendido. Alguien decía que 6 Tamayos eran demasiados, y comenzaron a pensar en una operación política más grande, por si las moscas. En una ruptura que no fuera personal, sino política. Quizás Rafael Simancas esté por ello con Sánchez, porque el sufrió la operación Tamayo. Digan lo que digan algún@s participes, saben que el motivo no es otro, y no debieran negárselo, y que las inquinas secundarias o posibles prebendas u ofensas, perjuicios o beneficios, no ocultan la mayor, y si la mayor les repugna, están a tiempo todavía.
Saben l@s Tamayaz@s que así se deja a España y los restos del PSOE a los pies del PP, sea cual sea el final de su conflicto interno. Y esperan ganar, que la verdad sea olvidada con el tiempo y perdonada, porqué Spanish is diferent, esperpéntica decía Inclán. Quizás sean capaces de eludir la sombra del PASOK, a la que acaban de insuflar vida; si gana Feijó en Galicia, Gobierna Rajoy en España, ¿por qué no l@s Tamayaz@s en las próximas, dirán, no sin cierta razón o posibilidad?
Ahora, nos queda por ver el arrojo de Sánchez y su equipo, sabedores del apoyo de la militancia y la respuesta de ésta, como organizan a la misma, desde los municipios donde las comunidades están perdidas (se quejaban ayer l@s Tamayaz@s, de que en las redes no se estaban manifestando falsos militantes del PSOE, se deben organizar l@s militantes en su respuesta, con independencia de la iniciativa federal).
Lo claro es la voluntad escisionista de l@s Tamayaz@s, que no han esperado al Comité Federal, y que como han detallado los medios sin titularlo, han diseñado y puesto en marcha un plan escisionista.
Después de eso, está claro que están dispuestos a todo por “el interés de España” dicen. Y Felipe apunta, por el interés de España debemos dejar gobernar a Rajoy, y dejarnos de gobiernos Frankenstein, porqué el monstruo es Frankenstein, ¡Claro está!, y su profeta en la tierra se llama Pedro Sánchez.
Un cordial saludo.